miércoles, 18 de marzo de 2009

La entrevista fue sobre Bergman

Andan haciendo entrevistas a todos los erasmus. Nos citan y acudimos a arrojar nuestras diferencias con la vida sueca. Se trata de unos diez minutos conversando con una mujer con la que llevamos tratando todo el año. Bajo esa furia blanquecina que tiene por melena y esos ojos azules azotados por el Báltico aguarda un ser que recoge cualquier problema como pudiese hacerlo una madre. Reconozco que acudí con algo de temor. Son casi ocho meses aquí y aún se me encoge el estómago cuando me enfrento con la burocracia. Incluso llegué a pensar en no asistir pero tratándose de Monica Mellberg son pocos los que pueden hacerlo sin soportar un ardor en las entrañas. Y ahí estábamos los dos, ella haciendo preguntas sobre su guión, yo respondiendo sobre el guión de mis días. Me preguntó si quería hablar de algo en especial y no dudé en contarle la principal razón por la que vine. Pronto se convirtió en una tertulia sobre Igmar Bergman. El modo en que la sociedad sueca se ve plasmada en su obra, la tragedia de sus planos, el guión hipnótico en busca del trauma, la sesión siniestra de compartir terapia con uno de sus personajes. Acabó rápida la entrevista, demasiado. Salí del despacho golpeado por aquellas reflexiones. En ese momento hubiese hecho el mismo viaje del Profesor Isak Borg en Fresas Salvajes, en ese momento fuimos Bergman, Mellberg y yo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando necesites hablar en cristiano con alguien que vive allí y entiende a estos suecazos, busca a esta chica en la biblioteca del edificio D

http://todounpunto.blogspot.com/

Anónimo dijo...

Julito y su sensibilidAD, Julito y su particular forma de ver y vivir la vida.

Jose A Baeza dijo...

Jejejej, la verdad es que este hombre engancha con su plática acerca del cine, ya sea por la pasión con que ÉL se involucra o por la curiosidad por aprender que YO le añado, a menudo combinamos la sobremesa con el cine.

Grandes del cine y muy grandes del cine. Peliculas que tengo que ver y películas que no he visto. Así transcurren nuestras charlas cuando nos dejan ;-)

El café sueco es malo, sí; pero yo creo que no lo cambiaría nunca.

Espero tenerte pronto de vuelta compañero.

Julito "El Gatopardo" dijo...

Jose, puedes creerme. Estoy extrañando esa mezcla de agua y granos de café.

Désirée dijo...

Anda, pues sí, soy yo.
Qué gracia que la gente te haya recomendado mi blog.
Un saludo y hablamos en cristiano cuando quieras!

Anónimo dijo...

Sé que es un poco tarde pero ya sabeis eso de que más vale........ así que aquí os dejo un "bochornoso" link

http://lasclasesmedias.blogspot.com/2009/05/el-drama-del-cine-espanol-gasta-casi-el.html

¡Disfrutadlo y a las armas!